El otro día hablando con mis compañeras, alguien dijo que le gustaba mucho el café con hielo y baileys a lo que yo añadí, que a mí me gustaba más con crema de orujo.
Y ya os podeis imaginar lo que pasó... pues sí, ésta menda tenía antojo de crema de orujo.
Así que me puse manos a la obra, hasta que dí con la receta, la hice, la probé y no os creáis que me gustó mucho, que va! para mi gusto estaba un poco fuerte.
La dejé en la nevera y al día siguiente la probé y ... Voîlà!! me chifla!! jajajaja
Así que (ya os lo pongo en las notas del final), mejor dejar reposar, al menos, de un día para otro.
Como podeis ver en la imagen, salió, más o menos, un litro.
Ingredientes:
- 200 ml de orujo blanco
- 200 ml de café recién hecho (yo usé descafeinado)
- Unos 600 gr de leche condensada (yo usé casera y sin lactosa, la receta aquí. OJO! hay que hacer el doble de la receta)
- 1 cucharadita de extracto de vainilla (receta aquí)
- 1 sobre de preparado para flan (yo usé de la marca Royal)
Modus operandi:
SI VAS A HACERLO CON LA LECHE CONDENSADA CASERA, ANTES QUE NADA MIRA LA RECETA PARA PODER HACERLA. ACUÉRDATE, QUE TIENE QUE SER DOBLANDO LOS INGREDIENTES.
- En una batidora americana, mezclamos todos los ingredientes (da igual el orden en que los pongas).
- Batimos unos segundos.
- Metemos en una botella y dejamos en la nevera hasta que se enfríe.
NOTA1: Si lo pruebas nada más hacerlo, va a saber demasiado fuerte (doy fé).
NOTA 2: Sabe mucho mejor al día siguiente (también doy fé).
NOTA 3: Hay que agitarlo bien antes de servir.
Espero que os haya gustado!!
Buen provecho!!
Muchas gracias, voy a probar a hacerla para el fin de semana, a ver que tal me sale.
Gracias a tí por pasarte. Ya me contarás 😉